El navegante mercedino contó sobre su larga experiencia en el motociclismo. Y recalcó, “uno siempre quiere ir a las competencias para conocer, somos todos amigos”
Por Sofía Jaimez Bertazzo
La primera vez que se subió a una moto tenía 4 años. Su padre, ya de grande, iba a competir. Ese día, en la carrera, Martín descubrió su pasión. Entre risas contó: “yo veo una motito chiquita voy y me subo”, “no me quería bajar”. Después de eso “mi papá llegó un día con una yamahita chiquita”.
Martín dijo: “lo nacional fue mi primer sueño”, quería ganar en todas las categorías, y después agregó, “nunca imaginé correr un Dakar”. Para él, subirse al podio representando a Argentina, “son sensaciones únicas” y “por eso creo que uno no puede dejar el deporte”. El paso de motocross a enduro fue un gran cambio y requería preparación. Para el piloto lo más duro fue aprender a llevar la moto en piedra, pues los suelos blandos eran de su preferencia.
Todo comenzó como un sueño y fue creciendo. Su familia, vecinos y amigos siempre estuvieron presentes. En 2015 lo ayudaron para conseguir el presupuesto, Duplessis comentó “las veces que habré llorado y dicho porqué no tengo la posibilidad de dedicarme solamente a entrenar y a competir”.
“Por ahí de afuera me ven y piensan que me fue todo fácil en la vida, que salió todo bien. Pero por ahí no, yo soy muy tímido y me costaba ir a golpear la puerta. Tuve la suerte que tenía a mi viejo, al lado mío y que tenía a mi vieja”, eso “también es bueno porque uno aprende a valorar”.
Cuando ganó el Dakar Series, las metas internacionales comenzaron. Martín expresó: “ir a mi primer Dakar con una inscripción ganada era increíble, para que te des una idea una inscripción vale 16.000 €, aparte la moto, el equipo”, “cuando yo levanté el cheque decía un pase al Dakar y la verdad en mi vida había ganado tanta plata”. Así en 2016 corrió su primer rally y agregó una reflexión, “el Dakar nos hace a todos iguales” mientras contaba anécdotas compartidas con deportistas que admiraba.
Martín dijo: “el 2017 fue mi mejor Dakar”, “para poder correr yo tenía que vender si o si mi moto”. Era todo o nada, cuando el rally terminaba él volvía sin nada a casa, pues había alquilado una moto para correr. Rememorando expresó: “yo venía angustiado, entregado, de estar 8 pase a 22”, pero al pasar por la provincia de San Luis sus ánimos cambiaron. La gente le brindo mucho apoyo, “ver todo eso me levanto”, “todos me decían no sabes cómo te está siguiendo la gente”. Al final del recorrido quedó decimoquinto en la general.
En el año siguiente Martín Duplessis empezó a competir en un equipo oficial, con una moto Honda CRF 450. Esto significó un gran cambio para el corredor, ya que tenía otro tipo de sostén. Luego en 2019 se vio obligado a abandonar en la quinta etapa del recorrido del rally. Su mano estaba muy debilitada y no pudo seguir la carrera. Martín contó: “yo llego al Dakar fracturado”, “no decía nada para no preocuparlos pero venía con mucho dolor”
Esta lesión no le permitió prepararse para Arabia Saudita. “El Dakar 2020 no lo hago porque no sabía si iba a estar bien de mi mano” expresó Duplessis. Sin embargo, llegaron buenas noticias, la Triple Corona de Arena. El mercedino dijo: “me hice fuerte en el Nihuil” y “ahí me di cuenta que mi mano iba a aguantar”. Y así fue, no solo ganó ese desafío sino que también fue campeón del South American Rally Race. Un recorrido que se diseñó para reemplazar al Dakar en Sudamérica.
Para comenzar como navegante Martin recomendó: “empezar de menor a mayor” y “no apurarse”, pues, “lo mejor es no golpearse de entrada”. Además agrego que lo principal es “tener mucha orientación y mucho entrenamiento”. También comentó: “un buen navegante o buena navegante para mi es lo mismo, yo los considero igual porque los dos lo pueden ser”, haciendo referencia a las mujeres en el mundo de la moto.
No te pierdas la charla con Martin Duplessis. De menor a mayor, de los sueños a las lesiones, una historia de dos ruedas.
El último campeón de la carrera más difícil del mundo se prepara para otro triunfo. Kevin Benavídes habló en exclusiva con GOLANDPOP camino a Arabia Saudita.
Kevin Benavídes será el portador del N°1 en la edición 2022 del Rally Dakar. Es la primera vez en la historia de esta competencia que un argentino tiene este reconocimiento, ya que se convirtió en el único sudamericano en triunfar en moto, “eso representó todo mi sueño” afirmó el salteño y va por más. El corredor será parte del equipo de KTM y sueña con llevarse un nuevo título, para ser el primer piloto en ganar con dos marcas diferentes.
La competencia se realiza desde el 1 al 14 de enero en Arabia, contará con trece jornadas de competición y un descanso programado para el día 8. El recorrido será de 8.177 kilómetros hasta alcanzar la meta de Jeddah.
El director del Dakar, David Castera, anunció que el tramo más complicado de la carrera se presentará en la jornada 11, porque es el trayecto con más dunas. Además agregó, que gran parte del recorrido es nuevo, con lo cual “es complicado decir ahora cuál será el nivel de dificultad de la navegación porque las pistas pueden cambiar”.
“Creo que en Honda había cumplido un ciclo, estuve cinco años, en donde también sentí que al haberle dado la victoria cumplí con mi trabajo. Entonces dije, que creo que es momento de probar en otra marca”.
Kevin Benavídes en charla con Sofía Jaimez Bertazzo para GOLANDPOP
El año fue duro, el piloto tuvo que someterse a una cirugía en el hombro, que le llevó cuatro meses de recuperación para subirse nuevamente a la moto. Pero le sirvió para conectar y arrancar de cero con el nuevo equipo de KTM. “He llegado muy bien para este Dakar, así que me siento muy contento por la recuperación que he llevado a cabo.
Para llegar al máximo nivel es necesario un equipo factory y el roce internacional. “Se puede demostrar en diferentes carreras de rally que uno tiene nivel y que puede ser competitivo. Que vean ese resultado equipos de afuera, te ayuda para que te puedan fichar”.