Talleres perdió 1 a 0 con Vélez en el Kempes por la vuelta de cuartos de final y se despidió de la Copa Libertadores. El resultado final de la serie fue 4-2 para los de Liniers.
Se acabó el sueño americano del matador. La fría noche del miércoles 10 de agosto de 2022 quedará marcada para siempre en la memoria de todo el pueblo albiazul. Y ese recuerdo tendrá un sabor agridulce al principio, pero casi con certeza, culminará por despertarle una sonrisa a todos los hinchas que, desde las tribunas del Kempes y desde todos los rincones del mundo, hicieron fuerza hasta el final por una hazaña que finalmente no ocurrió.
Es que esta fecha marcó el final de la participación del equipo de Caixinha en el torneo más importante del continente, en la que fue la mejor performance de un combinado cordobés en la historia.
El partido
El encuentro de vuelta jugado en el Kempes tuvo a un Talleres que quiso en todo momento pero muy pocas veces pudo. Con Enzo Díaz por izquierda y Diego Valoyes por derecha como los jugadores más punzantes y desequilibrantes de la noche, pero sin generación de jugadas de peligro real para el arco defendido por Hoyos. A medida que fue pasando el tiempo esta tendencia se marcó con más claridad, Vélez replegado esperando para salir de contra, Talleres intentando avanzar en el campo pero no pudiendo tener peso en ataque.
En el segundo tiempo los cambios del DT portugués movieron un poco el avispero, e hicieron mella en el equipo que se adelantó unos metros en el campo y comenzó a llegar con más gente al arco velezano. Ortegoza fue un buen aliado para conectar pases entre volantes y delanteros, y fueron los 20 minutos del complemento donde la T pudo haber marcado la igualdad en la serie. Premonición que jamás se concretó porque la defensa del fortín estuvo muy sólida durante toda la noche, pero también por la ineficacia del equipo local para generar situaciones reales de riesgo, un mal que Talleres padece hace rato.
“El rival hizo un buen partido en defensa. Para mi, el momento del juego fue la lesión de Fede (por Girotti). Aunque el equipo no estaba fino, estaba llegando, era el dueño del juego, con llegadas. Después de eso, el equipo no se encontró, no llegó al área rival y ellos aprovecharon muy bien su chance”
Caixinha – DT Matador
Así las cosas, al final la T fue con más empuje y ganas que ideas claras para dañar al rival. Hasta que Vélez, que se relamía porque veía cada vez más cerca las semifinales, aprovechó una mala salida del fondo y no perdonó, gol de Fernandez tras una magistral habilitación de Lucas Hanson (la figura de la serie) y fin del sueño americano para la T.
Balance positivo
La histórica participación de la T dejó varios puntos por demás positivos que muchas veces no son cuantificables pero suman en demasía. Como la gran ilusión del hincha que se enarboló detrás del equipo y lo acompañó hasta la última función llenando el kempes en cada partido de local (y aumentando las arcas del club con los ingresos por entradas). La confirmación de que Pedro Caixinha puede ser ese conductor confiable y convincente para lo que vendrá. Y sobre todo que el equipo de barrio jardín tiene en su plantel jugadores que dieron la talla en el torneo continental y que, ya sin la copa, podrán enfocarse en levantar en la liga profesional actual y, porque no, ser protagonistas en la de 2023.